Cada caricia, cada perfume, cada textura, cada banco, cada parque, cada portal, cada mirada, cada sonrisa, cada beso, cada abrazo, cada foto, cada canción, cada ritmo, cada paisage, cada sentimiento, cada temperatura, cada palabra, cada sueñ, cada ilusión, cada mariposa de tu barriga, cada uno de tus nervios, cada cuerpo temblando por el frío o los nervios, cada momento, cada calada, cada borrachera, cada fiesta, cada día estudiando en casa, cada hora, cada minuto, cada día, cada mes y año, cada lágrima, cada sonrisa, cada desodorante, cada rayada, cada carcajada...Cada cosa te recuerda a personas diferentes...O a una. Piensa en quien te hace recordar todo eso. Diferentes personas o ¿la mayoría solo a una? Si la mayoría de estás cosas te recuerdan a una sola persona, no la dejes escapar, vale la pena.